incansable todo nervio y acción
una bomba de ideas de proyectos de iniciativas
de nuevas aventuras
convincente
un luchador
rebelde
un referente para muchos de los que le conocíamos...
hoy he vuelto a verle después de dos años sin saber de él
algo se había roto
algo profundo esencial
había perdido la fuerza la rebeldía la rabia
nada quedaba del hombre que conocí
sentado en la barra de aquel bar
apalancado a la banqueta
como si una fuerza magnética
tirara de él hacia abajo
y le tuviera atrapado en una tierra extraña y cruel
bebiendo con una tristeza infinita
que venía de algún lugar que solo él conocía
fumando con desgana
para matar el tiempo
y disimular el vacío
empantanado en unas aguas profundas sucias muertas
hablando sin nadie que le escuchara
sin garra
con la mirada ausente sin brillo
los ojos secos la boca seca la piel seca
las manos muertas
el alma muerta
totalmente derrotado
como algo inservible
como algo inevitable
como si no tuviera la menor importancia
como algo natural en el ser humano
algo desgarrador en un ser humano
Foto: Vivian Maier
una bomba de ideas de proyectos de iniciativas
de nuevas aventuras
convincente
un luchador
rebelde
un referente para muchos de los que le conocíamos...
hoy he vuelto a verle después de dos años sin saber de él
algo se había roto
algo profundo esencial
había perdido la fuerza la rebeldía la rabia
nada quedaba del hombre que conocí
sentado en la barra de aquel bar
apalancado a la banqueta
como si una fuerza magnética
tirara de él hacia abajo
y le tuviera atrapado en una tierra extraña y cruel
bebiendo con una tristeza infinita
que venía de algún lugar que solo él conocía
fumando con desgana
para matar el tiempo
y disimular el vacío
empantanado en unas aguas profundas sucias muertas
hablando sin nadie que le escuchara
sin garra
con la mirada ausente sin brillo
los ojos secos la boca seca la piel seca
las manos muertas
el alma muerta
totalmente derrotado
como algo inservible
como algo inevitable
como si no tuviera la menor importancia
como algo natural en el ser humano
algo desgarrador en un ser humano
José Pastor González
Foto: Vivian Maier