Como el amor
esa hoja que cae del árbol
desde la ramita que ocupa el lugar de la luz
así te amo
-ese paisaje instalado en los placeres de nosotros-
con toda la noche encendida en una lámpara
dentro de tu boca
para darme siempre el refugio caliente
iluminado
donde transitarte cuando tu lengua da sombra
y son pequeñas las patitas de un pájaro que anida
aquello que somos
en lo invisible
de absorber a huracanadas todo el mar