Mi cansancio mi angustia mi alegría mi pavor mi humildad mis noches todas mi nostalgia del año mil novecientos treinta mi sentido común mi rebeldía. Mi desdén mi crueldad y mi congoja mi abandono mi llanto mi agonía mi herencia irrenunciabl...
Read More »Un pájaro llega a la ventana. Es un errorconsiderarlos solamentepájaros, muy a menudo sonmensajeros. Por eso, una vezse precipitan sobre el alfeizar, se quedanperfectamente quietos, para burlarsede la paciencia, alzando la cabeza para...
Read More »Los cuerpos se quedaban del lado solitario del amorcomo si uno a otro se negasen sin negar el deseoy en esa negación un nudo más fuerte que ellos mismos indefinidamente los uniera. ¿Qué sabían los ojos y las manos,qué sabía la pi...
Read More »Mira, no pido mucho, solamente tu mano, tenerla como un sapito que duerme así contento. Necesito esa puerta que me dabas para entrar a tu mundo, ese trocito de azúcar verde, de redondo alegre. ¿No me prestas tu mano en esta noche de fin ...
Read More »“Desde lo alto de estas solitarias regiones nuestras miradas se sumergían en un mundo inhabitado. [...] Contemplamos las plantas distribuidas por zonas, según disminuía la temperatura de la atmósfera en relación a la altura del lugar. [...] La ap...
Read More »Si te deja de querer tu madre,si se te marchitan las plantas,si te rompen el corazónpor enésima vezo se te encoge al lavarlo tu jersey favorito,(ll)ámame.Si comes mal y apenas duermes,si la resaca es tu más fiel compañera,si tro...
Read More »“Sólo desde lo alto del infinito buen humor puedes observar debajo de ti la eterna estupidez de los hombres, y reírte de ella.” Milan Kundera
Read More »A quien me pregunta cuántos amores he tenido le respondo que mire en los bosques para ver en cuántas trampas ha quedado mi pelo.
Read More »Veo que no queréis bailar conmigoy hacéis muy bien. ¡Si hasta ahora no hice más que pisaros, si hasta ahorano moví al aire vuestro estos pies cojos!Tú siempre tan bailón, corazón mío.¡Métete en fiesta; pronto,antes de que te quedes sin pareja!¡H...
Read More »Si pudiera meter en la batidora el color de las nubes cuando se oculta el sol, tu sangre y la mía y dos onzas de leche, mi primera muñeca, tu diario de juventud, la cruz bajo la que me santiguaba los domingos con temor y respeto, ahíta de fe, el esm...
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