PREFIERO EL YUGO
El lanzador de cuchillos lee poesía
El funámbulo sin red la escribe
prefiero el yugo que implica
la lealtad al rebaño que
el de la amenaza sombría
del pastor
Hasta que me postulen
a perro guardián
y aprenda el idioma del ladrido
en los fastos al amo
La tregua
es corta
El silbido
La correa
¿Podré al menos elegir su color?
Teníamos el fuego
Eran de cera sus palacios
CONOCIDOS ASESINOS
Al viejo payaso del Buffalo Bill´s Wild West
todos le respetan
Lo del lanzador de cuchillos que bebe el bourbon
como agua es otra cosa El payaso es capaz de
matar por un aplauso y no sentirse fuera de lugar
conocidos asesinos. Son el ejemplo
que exhiben para nuestros hijos
en la franja de mayor audiencia
Teníamos el fuego
Eran de cera sus palacios
HACIA EL
Aquí todos recelan de Los Bordini
—Mandaron quitar la red a pesar de sus
muertos—
Están convencidos que el riesgo que toman les
pone a ellos en evidencia
hacia el cementerio corrían
los señalados por el odio Pensaron que
era un barco encallado en las aguas del sosiego
Creyeron que
la M entre Jorge y Molinero tenía
el significado del Mar
Teníamos el fuego
Eran de cera sus palacios
HA MUERTO
Hay dos clases de dictadores: el que mata al
poeta para silenciar el grito
y el que perdona su vida para que adorne su
atrocidad Ignoro cuál de ellos es más inhumano
Decido zurcir mi boca y fundir en muñón mis
dedos Únicamente hay un poema en el índice
Sólo allí reside la energía de los esclavos
ha muerto. Y se olvidó de vivir
Teníamos el fuego
Eran de cera sus palacios
Sólo cuando fraguó el hormigón
comenzamos a soplar
Jorge M. Molinero,
de La ceguera del lanzador de cuchillos
(Editorial Páramo, 2022)