Aprendices de palabras, estamos rodeados de historias, anécdotas singulares y sorprendentes, si miras hacia afuera; hacia adentro, tu propia singularidad. Y las palabras ahí, para dar forma, color, ritmo…
¿Por qué nos empeñamos en convertir lo puramente narrativo en lírico, como si el lenguaje poético fuera solo cuestión de versículos?
La voz de un poeta es la que da forma a su poética, no hay divisiones entre lo íntimo y lo no íntimo, eso es otra trampa del lenguaje.
Y esta voz se deja enmascarar consciente o inconscientemente.
Palabra instrumento. Para cualquier aprendiz, o chamán.