Al fin, un 9 de agosto han llegado tus dos joyitas, querido amigo Vicente. Ya difíciles de encontrar, como el agua en estos tiempos. Once días ha tardado el "Pony Express" en cruzar los Estados Desunidos desde León a Algeciras.
Audazmente, los jinetes de jamelgos, tan cansados como los animales, han podido llegar a su destino conduciendo libros, letras, palabras que cruzamos entre viejos frikis que siguen añorando el olor a papel, su tinta modelada en la belleza de los mejores deseos para quien lo recibe. Te estoy muy agradecido por hacerme llegar estos dos "'instrumentos" que me ayudarán a seguir aprendiendo sobre las incertidumbres, sobre tu historia vital, sobre mí.
Un abrazo fuerte de Ramón.
P. D. Muchas gracias por tus dedicatorias.