En estos dos largos años aciagos, desde la pandemia, hemos perdido en este país muchas cosas importantes casi todos: familiares y amigos, tiempo, salud, libertades y derechos, energía, paciencia, fe, dinero, perspectiva e ilusión... Pero sobre todo, y en lo tocante al gremio literario, sentido crítico... En el momento peor y más distópico que mi generación ha vivido, la poesía social y la crítica al sistema, como por arte de magia, ha desaparecido, o se ha reconvertido, en el mejor de los casos, en rosas y pétalos: jamás pensé que podría suceder algo así, pero ha sucedido, qué triste... Bajo los adoquines la playa, no obstante, para los que aún quieran escuchar el mar...
Vicente Muñoz Álvarez