Y justo en él, en su incansable ir y venir, y en William Hope Hodgson pensaba yo el otro día, sin dormir pero soñando, al pie del faro de Suances, recorriendo sus vertiginosos acantilados y sendas, la Playa de los Locos, los miradores y flores de los suicidas, el horizonte eterno y el mar, mientras mi chica hacía click en su cámara y congelaba en el tiempo mi imagen... Yo es otro, me ha parecido de nuevo al verme, al casi no reconocerme, como cuando me miraba en el espejo de niño, y soy ya mayor... Los vientos y mares cambian, me susurro como un mantra al oído, los faros y el corazón no...
Vicente Muñoz Álvarez
Photo by Marlus Leon