La autora, como la guerra, nace y crece en este poemario.
Mitad gallega, mitad croata, se pasea en estos versos oyendo disparos cercanos, escuchando mil lenguas, anotando todo como si fuera un diario de soldado. Así, el libro, se convierte en testimonio, en un viaje vital cruzando fronteras, en una pérdida gradual de lo que ancla y en un intento denodado por recordar el olvido.
La presente edición, reescrita y ampliada, es un mapa del dolor y el amor, una «historia para un espacio / que ya no es el mismo espacio», el dibujo, a lo largo de los años, de los límites del vacío.