Si los autónomos éramos ya, después del lince ibérico y tras los desatinos de todos los Gobiernos (da igual la bandera y el color), la especie más amenazada y en peligro de extinción de este país, ahora estamos lo que se dice al borde mismo del abismo... La salud es lo primero, por supuesto, pero si el Estado y la ciudadanía (es decir, vosotros) no hace rápidamente algo al respecto, millones de autónomos nos vamos a ir de cabeza al arroyo en pocas semanas... Y si nos vamos nosotros primero, la empresa privada, la pública va a ir, como un castillo de naipes, inmediatamente detrás... Hora, pues, de máxima concienciación, sanitaria y económica, pública y privada, porque la cosa, al margen de que sobrevivamos o no al virus, para muchos puede ser fatal.... La solidaridad, ahora y más que nunca, al margen de lo sanitario, la tenéis que demostrar también comprando en el pequeño comercio de vuestro barrio cuando vuelva abrir sus puertas (si es que logra hacerlo), no por internet (por ahorraros cuatro míseros céntimos), o todos vamos a pagar a la larga un alto precio...
Vicente Muñoz Álvarez