algo que me relaja como ninguna otra cosa en el mundo, que yo sepa: los paseos kilométricos por la playa al amanecer... dejar a mi ángel soñando con caracolas y bajar yo solo, después de fumarme una buena pipa, a caminar descalzo por la orilla del mar... y entonces, como en tromba, miles de sensaciones y emociones y sinestesias, cada olor e imagen y color sugiriéndome asociaciones y visiones nuevas, la gasa azulverdosa de la línea del horizonte y Conrad, mis huellas sin rumbo en la arena y Kerouac, aquel islote a lo lejos y Stevenson, el tekeli-li de una gaviota en el cielo y Poe, las olas estrellándose contra mi conciencia y Cravan, etc etc... puro símbolo y correspondencia todo en la playa al amanecer, mi magdalena de Proust personal, mis dunas sin extranjero a la vista, mi terapia, tras los días de ruta, para renacer...
Vicente Muñoz Álvarez
photo by Marlus Leon