Pasado el Mundial, nos toca centrarnos en lo importante, comenzando por aterrizar en su categoría a los futbolistas: no son héroes nacionales. Llamarlos así, es reducir a mero trámite deportivo las verdaderas gestas que nos han traído hasta hoy. Los futbolistas compiten, es su profesión, los héroes lo fueron por dignidad. Ni héroes ni villanos: futbolistas. Seguir leyendo aquí.
Artículo publicado en el periódico La Prensa, 10 de julio de 2018.