De las lecturas y relecturas marcadas para este año que poco a poco comienza a extinguirse, quiero destacar la de un escritor contemporáneo: Vicente Muñoz Álvarez. Comencé a hojearlo hace unos días y ya no pude parar. Sus "regresiones", sus memorias, casi desde la mirada del niño que nunca nos debiera abandonar, me hicieron mirar hacia mi propia vida, al territorio de los gratos y borrosos recuerdos de la niñez; tan similar fueron nuestros años de magia a uno y otro lado del océano...
Hemingway, Dos Passos y Wolfe, esperan pacientemente sus respectivos turnos de lectura. Sé que lo entenderán.
Ernesto Cobos