Con animales y niños todo azúcar es poco para cualquier receta cinematográfica.
Spielberg lo sabe y Lasse Hallström capeó bastante bien el peligro de la sensibilería cursi en Siempre a tu lado (Hachiko, 2009).
Recordemos su lacrimógena y enternecedora última escena hoy, Día Mundial de los Animales.
Recuerden siempre a Darwin y no olviden expandir su círculo de compasión al mayor número de seres vivos posible.
Bonus track: lo mismo pero en versión Futurama.
Final de su mítico episodio Ladrido Jurásico (2002):