Criaturas celestiales,
antagónicas o invisibles.
Somos criaturas nacidas
en un acto repetitivo
robado, escabroso o placentero,
fruto de venganzas personales
o de amor sublime
que perdura o se marchita
en el tiempo y la rutina.
Criaturas abandonadas, perdidas
en medio de una avenida o en un bosque;
en un contenedor de basura,
en un hospital de la S.S.
-yo nací en uno privado
de cuervos por enfermeras,
terreno por conquistar
en tierra de nadie-.
Criaturas de palacios de espejos versallescos.
Criaturas hijas de obreros
o de duques y señoritos.
Criaturas sin futuro
y con pasado conflictivo.
Criaturas entre algodones;
criaturas cerriles.
Criaturas generosas,
creativas, subversivas,
adocenadas y sumisas.
Somos el hilo de la madeja
que sostiene paciente
dos manos abiertas y generosas
en paralelo extendiéndose para crear
un complejo ovillo
que contiene
todos los colores de la vida.
Una vez en la máquina tejedora
seremos jersey, chaqueta
o calcetines.
Quizás gorro o manta
que nos salve de la intemperie.
Julia Navas Moreno
Cover by Casilda García Archilla