es no saber a qué atenerse nunca ni poder hacer planes con nada ni sentarse con los ojos cerrados a respirar... hay muchas cosas raras en la vida, pero esta quizás la que más... y lo es porque igual que el desamor y el infortunio y la muerte están siempre ahí, acechando, también la fortuna y el amor que redime, y así es muy difícil saber qué postura existencial adoptar... es raro que de la noche a la mañana aparezca o desaparezca el amor o que de vivir pasemos en un instante a morir y es raro que la fortuna vaya y venga a su antojo... pero los momentos, me digo, céntrate en los momentos: Cesaria Evora en una tarde de domingo otoñal, su voz celestial, o la piel suave que a veces cura ciertas heridas o simplemente la tranquilidad de algunos instantes y días... en eso, en esos momentos, me repito como un mantra, me tengo que concentrar...
Vicente Muñoz Álvarez