a vueltas, siempre, con el tiempo... qué diablos es el tiempo y cómo se le puede domar: cómo graduarlo, atraparlo, entenderlo... a vueltas siempre con lo mismo, la tiranía del reloj, la sinrazón de las horas, y estrellándonos una y otra vez con las mismas barreras... minutos como días y días como minutos, he ahí la cuestión, y el eterno dilema: cómo lograr regularlos... porque lo bueno se pasa volando y lo malo se estira aplastando, pienso, porque la proporción es injusta y las cosas deberían ser al revés, pienso... como un camino lleno de montañas y curvas que nos impidieran ver lo que hay adelante y atrás, el tiempo, pero sabiendo, no obstante, que atrás y adelante es el mismo camino... a vueltas siempre con el tiempo, el caprichoso tic tac del reloj, la gravedad de los granos de arena, el agua marcando las horas y el fuego quemando los días... todo depende del punto de encaje, me digo, Don Juan (Matus) tenía razón, transfórmate en águila y cambia la visión...
será como ver
será como ver
desde lo alto del monte
todo el camino
Vicente Muñoz Álvarez