Si no me equivoco, desde que inaugurara el blog en el año 2010 no ha pasado un mes sin que actualizara mínimo en una ocasión. Procuro hacerlo cada semana o, al menos, cada quince días. Me he relajado en este caluroso mes de agosto, pero hoy me siento animado para publicar contenido porque tengo buenas noticias respecto a mi novela Desconexión. La Agencia Autores se ha interesado por el libro y me ha enviado una oferta para que pase a formar parte del grupo de autores que representan. He recibido un modelo de contrato y un documento con una serie de preguntas sobre Desconexión que debo responder para articular el proyecto editorial. Todavía estoy estudiando el contrato porque me han quedado algunas dudas (el lenguaje jurídico resulta árido para los profanos), pero considero un magnífica augurio que una agencia literaria compuesta por profesionales del mundo del libro haya visto potencial en mi novela.
Por lo demás, sigo trabajando en mi nuevo proyecto, que se esparce entre el universo de los sueños y los entresijos de la profesión periodística. Reconozco que he rebajado el ritmo de escritura en las últimas semanas, pero confío en recuperar el impulso y terminar en poco tiempo la primera versión. Cuando eso ocurra, como ya hice con Desconexión, enviaré algunos ejemplares en formato digital para que los lectores que lo deseen me ayuden a encarrilar la revisión.
Espero que estéis disfrutando del verano y que alguno haya aprovechado estas fechas para "desconectar" también leyendo mi novela (playa, montaña, viajes y literatura conforman, al menos para mi gusto, una exquisita mezcla). ¡Nos leemos!
Espero que estéis disfrutando del verano y que alguno haya aprovechado estas fechas para "desconectar" también leyendo mi novela (playa, montaña, viajes y literatura conforman, al menos para mi gusto, una exquisita mezcla). ¡Nos leemos!