La primera vez que salimos le propuse ver “Melancolía”, de Lars von Trier. A mí me fascinó, pero a ella no. Jamás he visto a una mujer mirar el reloj tantas veces en tan corto espacio de tiempo. Fue un error, lo sé. Esas cosas se reservan para cuando la relación está más avanzada y ya cada uno va al cine por su cuenta. Hay películas que es mejor ver a solas porque dicen mucho de ti.