Esta semana en Madrid nos dijeron que los restos mortales de Miguel de Cervantes se encuentran donde todos pensábamos: en el Convento de las Trinitarias en Madrid. Francisco Etxeberría, sabio en su oficio, dio la noticia a falta de la confirmación del todo poderoso ADN, vamos, que no nos fiamos ya de los libros y su registro de los hechos. Esto mismo, hace cincuenta años, basados en los textos, sería palabra de dios. Pincha aquí para seguir leyendo.