Masao Yamamoto |
Gritar es no oírnos decir,
es oír sin querer decir: nada.
María Sotomayor.
el grito migra la caída del cuerpo.
un puñado de mí
renombra
la velocidad infinita que aplaca el vuelo
un barco es motivo de partida.
todo barco es
intransigencia y ocaso
el grito rezuma estalactitas.
delirio oseo de contemplar dos
al borde de
uno
la intransigencia
nos convierte en sustancia incapaz
de anclar la voz,
como si dijese viento
al pronunciar mi nombre.