Es domingo por la tarde, uno de esos domingos en los que demandamos a la vida por su total ausencia. Me encontraba en mi estudio.La vida se fue a por tabaco y no regresa. Pensé en la posibilidad de haceros un regalo ahora que el año agoniza y la gente abre sus manos y sus casas para ofrecernos algo. Me puse a pensar y se me ocurrió la idea de improvisar un poema cortito y homenajear a alguien que me acompaña desde hace muchos lustros y es mi faro más brillante, mi isla tranquila en la tormenta.Espero os guste, no es gran cosa, solo unos versos improvisados casi sobre la marcha y una grabación pésima realizada con el teléfono. Ese alguien se merece algo mucho mejor. Algún día le corresponderé como es debido.
Un abrazo a todos/as. Os quiero.
http://youtu.be/f53MmNmJxr0