1. Aquí va un preámbulo sobre los libros autoeditados. Si no les apetece pasen al punto 3 para la reseña. El rayo que nos parta, de Jesús Artacho, es un libro autoeditado (el autocorrector se empeña en señalarme automedicado). Yo era de los que despreciaban la autoedición, lo veía como un fracaso. Fue Félix Romeo el que me hizo cambiar de opinión, el que me hizo ver que no había nada malo en autoeditarse un libro. A fin de cuentas, el que elige qué se publica o no es un editor y en una gran mayoría de veces lo hace poniendo en juego valores económicos (no sólo, claro), la posibilidad de que el libro (ya sea por renombre del autor, ya sea por calidad literaria a su parecer) cubra al menos los gastos invertidos. A veces se hace imposible (sobre todo al principio) sacar un libro, por qué no sacarlo tú si tienes confianza en tu creación (o, ya, siendo más prosaicos, por qué no sacarlo tú si te apetece, te sale de las narices, vamos). Félix, mucho más sólido en sus argumentaciones se sabía una lista de escritores, que ahora consideraríamos fundamentales, que se habían autoeditado sus primeros libros. A saber, Borges pagando la edición de Fervor de Buenos Aires, la madre de Rimbaud pagando la edición de Una temporada en el Infierno o El túnel que no salió hasta que Sábato pagó la edición. En cualquier caso, ahora, devaluar de primeras y por sistema un libro porque ha sido autoeditado me parece un absurdo del tamaño de un toro de Lidia.
lee la reseña completa en tanyible
The post El rayo que nos parta, de Jesús Artacho appeared first on La vida panorámica.