Me recomendaron que llevara ropa cómoda. Me vi de pronto con leggins sentada sobre una colchoneta con las piernas cruzadas ‘enfocando mi mente para recomponer mi energía personal’. ¿Mi qué? ¿Yo tengo de eso? Pensé que tal vez sería bueno escuchar la música de fondo, una especie de sonido monocorde que rápidamente provocó en mi tal sueño que apenas podía tener la espalda con la rectitud que me pedía el maestro. Sentí miedo de caerme de pronto para atrás sin sentido y quedar a merced de los demás participantes intentando despertarme, mientras yo seguía allí, tirada en la colchoneta, flipando con mis leggins.
(Proyecto VERA)