Mary Ann Clark Bremer: Cuando acabe el invierno.
Periférica. Traducción de Hugo Bachelli.
Mary Ann Clark Bremer es una perfecta desconocida. No doy con ninguna obra suya publicada en inglés. Wikipedia e Internet —desde mi perfil de usuaria— la silencian.
Alentada a escribir por un amigo suyo (igual que Gide incitó a Maria van Rysselberghe: Hace cuarenta años, Errata naturae), Clark Bremen redactó una serie de cuadernos literarios, novelas breves narradas con portentosa maestría y sobriedad.
El dolor de la pérdida temprana —de sus padres, de su tío, de su esposo— ya aparecía en Una biblioteca de verano, su primera obra. Al calor del consuelo de Virginia Woolf, en Cuando acabe el invierno intenta superar su «duelo en tránsito», hallar una nueva piel (sic) que le enfrente con el mundo.
El estilo de Clark Bremer es cristal puro: adquiere forma después de haber pasado por el fuego. No hablar no es el silencio. Su introspección, próxima a la mudez, captura. «Sequedad, dulzura, olivos. Unos guantes color verde nocturno. Los derrelictos del naufragio».
Me gustaría saber más de Clark Bremer. Cuando acabe el invierno es un bramido que calla. Hay que congratular una vez más a Periférica.