El pasado jueves 31 de agosto recibí por sorpresa esta entrada o reseña tan especial. La firma el gran poeta MANUEL LÓPEZ AZORÍN. Os animo a seguir su blog, aquí tenéis el enlace. Ahora vive en "Sanse", p uso en marcha y dirigió el Centro de Estudios de la Poesía (CEP) en la Universidad Popular "José Hierro" de esta localidad, creó la revista "Poesía en la diana", ha escrito guiones sobre Claudio Rodríguez, José Hierro, Rafael Morales y Rafael Montesinos.
Silvia Gallego: Espía mi bolso
Silvia Gallego (1980, Madrigalejo, Cáceres) ha publicado Espía mi bolso en la colección Anaquel de poesía (Cuadernos de Laberinto, Madrid 2013) Esta joven es profesora de Lengua y Literatura aunque creo este que verano se trasladó a Madrid.
Hasta la fecha publicado las plaquettes Trazos de color (2008),
Besos de almohadilla (2009) y Renglones de asfalto (2011). Ha participado en antologías como Radiografías poéticas o Enésima Hoja (2012) y en revistas, festivales, fanzines…
El libro se abre con una Carta a guisa de prólogo de Luis Alberto de cuenca y en ella le dice:
"Espía mi bolso es una auténtica delicia. Parecía que la poesía amorosa había dado todo lo que tenía dentro, que constituía una proeza inasequible escribir algo sobre el amor que no se hubiese escrito de antemano, y hete aquí que tú contradices ese parecer desde la frescura, la pícara ingenuidad, la docta sencillez de tus poemas".
Abrir este libro es encontrarse con lo que Silvia Gallego llama El contrincante:
Enraiza el latido
sofoca el instante
olvida la sístole
en este amanecer.
Mañana será nunca.
abraza mis huecos.
Si poetizas mi piel,
el Ritmo será nuestro.
Continuar leyendo es encontrarnos con Objetos el primero de los cuatro apartados de que se compone este bolso repleto de juegos de palabras, sugerencias y lenguaje de un tiempo actual, un tiempo en el que la juventud se comunica a través de las redes sociales, del móvil y al comunicarse emplea ese lenguaje tecnológico que para los que ya tenemos una edad nos resulta, a veces, extraño; pero además, al margen de eso, encontramos también un lenguaje cuidado que nos muestra con palabras unas imágenes tomadas con su personal Cámara de fotos:
Te detendrás en mi ombligo
y tomarás un plano de relieve.
Te perderás sin brújula
en las cuevas de mi piel.
Quiero tu calor, me decías,
con olor a sábanas
y ecos de amanecer.
Vibra el objetivo
en los contornos que dibujas.
Ángeles Mora nos ha dicho de este poemario: Como Silvia Gallego nos pide en el título de este libro que espiemos en su bolso, quiero decir, que fisgoneemos en su libro, no se me ocurrió otra cosa que poner el bolso boca abajo, o sea abrir de par en par las páginas de este libro, sacudirlo un poco, dejar que sobre mi cayeran las letras, las palabras, los poemas, uno tras de otro, sin orden ni concierto. Igual que se nos caen las cosas del bolso cuando buscamos algo.
Espía mi bolso nos ofrece chispas de ironía… nos muestra el amor, el erotismo, desde lo femenino, y nos lleva, dentro de un aparente distanciamiento, hasta lo íntimo con poesía de lenguaje de siempre y de ahora. Un lenguaje de nuevas tecnologías , en una poesía en la que esta mujer, joven y de este tiempo, sabe manejarse con soltura : “En un clickaparece tu link, / mapeas mi perfil, / navego por tu blog.” “Descarga / un aura de sonrisas.// Craquea / en tu interior los chacras// Formatea / las pesadillas contaminadas.” “¡No imprimas tu dolor! // Déjalo atrapado en Word ,/ que no cobre vida.”
En fin un libro este que nos vende ilusiones a bajo coste, sonrisas en oferta por sus páginas libro con el que te identificas sintiendo emociones, curiosidades, descubrimientos que provocan sonrisas
y cuando terminas de leerlo y mientras vas recordando lo leído: un dulce suave y delicado erotismo moderno, dosis de ternura, chispas de ironía, juegos de palabras, mucha pasión y mucho amor por la poesía recuerdas unos versos:
Duermo desnuda
por tantear
la pasión.
Quizá vengas…
me despierto
– esquizoverso –
Vas a la solapa de la contraportada y lees que: Silvia Gallego consigue susurrar al lector, romper la percepción automatizada. Y casi sin querer vuelves al poema VI de la sección titulada Emociones en MP8 y lees:
OFF
Mi silencio
acaricia tu ternura.
Ya
no
estamos.
Y esta lectura, que parece un juego, se convierte en amor por la palabra.