
Manuel Rivas, profesor en el Departamento de Lingüística, fue quien amablemente conversó conmigo sobre el libro después de leer algunos fragmentos en voz alta.
En un ambiente distendido, con una copa de vino en la mano, discutimos con los presentes, que me hicieron algunas preguntas sobre el proceso de creación de la obra, el origen de la idea o la interpretación de ciertos pasajes.
Agradezco mucho a todos los que se pasaron por allí su atención y su interés. Fue un rato estupendo.