Se está hablando mucho y muy bien (merecidamente) del ganador del Oscar al mejor Documental largo. Pero como ya se está hablando mucho de Searching for Sugar Man, ahora vengo yo a hablarles de otro grandísimo documental: El Impostor, uno de los mejores thrillers que he visto en los últimos años y un trabajo que es, en mi opinión, superior al dedicado a mayor gloria de Sixto Rodriguez.
Y es que en Searching for Sugar Man, Rodriguez aparece con una aureola de santidad tan brillante que sus destellos acaban cegando al espectador. Tras ver Searching for Sugar Man se concluye que en este mundo no existe ningún ser humano más virtuoso que Rodriguez...
Todo lo contrario de lo que van a sentir por la figura del protagonista de El Impostor.
Como El Impostor es un thriller muy-muy thriller, solamente voy a decirles dos cositas sobre este documental porque cuanto menos sepan de la increíble historia que cuenta, mejor para ustedes:
1.- No se lo pierdan.
2.- En los créditos finales suena una de mis canciones favoritísimas: The Wayfaring Stranger, un espiritual norteamericano del siglo XIX que ustedes, seguramente, habrán escuchado en muchas ocasiones porque se ha empleado en infinidad de películas, series de tv y documentales.
Mi versión favorita es la de Jonny Cash y es la que vamos a escuchar hoy (aunque en el documental suene la del grupo 16 Horsepower.)
Lo dicho. No se pierdan El Impostor porque es una historia que les va a mantener enganchados a sus pantallas (de la misma manera que el año pasado lo hizo la estupenda Man on Wire). El Impostor es el triunfo de la voluntad de contar una historia con una tensión narrativa en continuo crescendo. Que no les cuenten (ni lean) nada acerca de esta historia para la que aplica, más que nunca, eso de que "la realidad supera a la ficción".