Nueve cuentos (yo aprecio un guiño a Salinger) componen este libro de relatos del poeta gaditano José Mateos. Nueve cuentos bien diferenciados en cuanto a temas, estructuras y estrategias narrativas, donde priman la prosa sencilla y directa y los silencios y el poso de amargura o de pérdida que queda tras la lectura de los relatos hace que te hagan volver al principio para volver a leerlos.
El volumen se abre con Alexis y la razón histórica, donde un terrorista arrepentido piensa en dejarlo y vivir junto a su familia mientras conduce, junto con otro compañero, una furgoneta llena de armamento. ¿Cuándo ocurre lo imposible? trata de un profesor francés que va a dictar un curso de verano en El Escorial durante los últimos años del franquismo. El profesor, en otra época más idealista, vive una existencia gris y desengañada de la sociedad. En el curso conocerá a un joven estudiante que, de alguna manera, es él mismo cuando era joven. Por último, La piedad, retrata la relación de una madre y una hija a lo largo de toda su vida. Estos tres relatos, los tres primeros, son los de mayor fuerza.
Le siguen Hora de cobrar, donde se juega con el lector que cree asistir a un relato de mafias y que finalmente Mateos le da la vuelta al argumento. Este cuento consigue mantener el suspense en el lector. La cueva sin eco, que trata sobre la pérdida de la esposa; Viñetas del lado oscuro, que nos muestra en pequeñas pinceladas la decadencia y destrucción de dos yonquis; La voz de la sangre, un relato desgarrador sobre un padre militar que participó en una emboscada en Bosnia y se lo cuenta, a petición, al hijo; Fútbol, sobre los entresijos de la prostitución de menores; y El tratamiento, donde Mateos desmonta de nuevo las expectativas que nos habíamos formado en el primer párrafo.
De esto se deduce que la característica más sobresaliente de este libro de cuentos es la mirada, siempre acertada, con la que José Mateos aborda estos nueve relatos.