Como un niño al revés, aprender a escribir quizá consista en desaprender a hablar. En ir desactivando automatismos, expresiones ajenas, conceptos heredados, hasta toparse con la pavorosa incertidumbre de cómo decir las cosas. Desde ese punto de vista, alguien que se declare experto en escritura sería lo contrario de un escritor.
Niño al revés
Related Posts
El Otoño comienza… ¡Ahora!.
22 septiembre, 2016
Cortázar forastero (y 5)
29 agosto, 2014
Adaptación al miedo, de Víctor Peña Dacosta
19 enero, 2015
un gif, un poema
30 diciembre, 2012