Por qué no apruebo el boicot a Trueba. Los putos nacionalismos.

Los nacionalismos son perversos porque no dejan a la gente sentirse como le salga de los cojones. Para ello disponen de un catálogo de aberraciones coactivas que bajan desde la cima en la que vive el tiro en la nuca de los etarras y pasan por xenofobias, racismos, guetos físicos, guetos intelectuales, inmersiones lingüísticas forzosas, revisionismos históricos, ingenierías financieras, estereotipos y escupitajos en la cara. Cada nacionalismo, el asesino, el institucional y el paleto, tiene sus preferencias. Por eso odio a los nacionalistas (tengo que añadir "excluyentes" para los cortos de entendederas). No los odio por que ellos se sientan lo que quieran sentirse sino por obligar a los demás a sentir lo mismo bajo la amenaza de expulsión del lebensraum al que siempre cree tener derecho el autoproclamado pueblo elegido de turno.

Hoy vengo a decir que Fernando Trueba tiene derecho a sentirse como le salga de los cojones. Y tras sentirse como le salga los cojones, también tiene derecho a pedir dinero a quien le salga de los cojones para hacer la película que le salga de los cojones.

Así que opino que todos los que boicoteen La Reina de España por cualesquiera que sean las declaraciones o los sentimientos de Trueba son unos bárbaros. Otra cosa es que la película sea buena o sea una mierda, cosa que ni sé - ni me importa (porque personalmente no tengo ningún interés en verla).

 

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

You may use these HTML tags and attributes: <a href="" title=""> <abbr title=""> <acronym title=""> <b> <blockquote cite=""> <cite> <code> <del datetime=""> <em> <i> <q cite=""> <s> <strike> <strong>

*