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REIVINDICANDO EL CINE DE LOS 80 (19): LA COSA: TERROR ESPACIAL Y VISCERAL

«Una obra prácticamente sin trama con muchos efectos especiales y actores usados simplemente como objetos para ser cortados, acuchillados, destripados y decapitados«, eso decía The New York Times en su crítica de LA COSA (John Carpenter, 1982), una joya imprescindible de la ciencia – ficción que, como le ocurrió ese mismo año a Blade Runner (Ridley Scott), fue maltratada en su momento por crítica y público pero que el paso del tiempo ha reconocido como una obra de culto. Terror, angustia, paranoia y claustrofobia en una base científica norteamericana de la Antártida cuya cotidianidad rompe la llegada de un perro que huye de un helicóptero que le persigue con la intención de matarlo pero que en realidad es, como dice el título, una «cosa». Vamos al lío…
Siguiendo la estela del «slasher» más clásico, una serie de personajes se ven acosados en un determinado espacio por un asesino que va acabando con ellos uno a uno. Es Ridely Scott quien se lleva este esquema al espacio en Alien (1979) con la novedad de que el asesino es un extraterrestre previamente incubado en uno de los miembros de la tripulación de una nave espacial. LA COSA sustituye esa nave por una aislada base científica en que trabajan 12 personas. Y el asesino vuelve a ser un extraterrestre pero, ahí está la novedad, no tiene una aparente forma física, sino que toma la de la vida que «contamina», asimilando todo recuerdo, aspecto y habilidades de la misma. Y es así como intentará continuar infectando al resto y, por pasiva, a toda la humanidad…
Adaptando la novela corta de John W. Campbell Jr. ¿Quién anda ahí? (1938) que ya fue llevada a la gran pantalla en El enigma del otro mundo (Christian Nyby, 1951), Carpenter construye un relato asfixiante en el que constantemente sus protagonistas, liderados por su actor fetiche Kurt Russell (1997 Rescate en Nueva York, Golpe en la pequeña China), ponen en duda la identidad del resto, cualquiera de ellos puede ser la «cosa», que culmina con la magistral tensa secuencia en que la muestra de sangre de cada uno de ellos es expuesta a un cable quemado para ver si ésta reacciona, desvelando la identidad del portador de la «cosa».
A todo esto se suma el maravilloso trabajo de maquillaje y efectos especiales de  Robb Bottin (ganador del Óscar en 1991 por Desafío Total). Con tan solo 22 años fue pionero en el uso de animatronics para crear las terribles y realistas transformaciones que sufren las víctimas de LA COSA. Un trabajo sólo comparable en aquellos tiempos con el de Rick Baker en la transformación de Un hombro lobo americano en Londres (John Landis, 1981), que un año antes fue premiada con el Óscar a los mejores efectos especiales. Pero no, el trabajo de Bottin ni siquiera fue nominado y, para más inri, aquel año el Óscar al mejor maquillaje se lo llevó, atención, que es para tirarse de los pelos, Gandhi (Richard Attenborough). Por si fuera poco, este año Pierre-Olivier Persin está nominado al mejor maquillaje por La sustancia, que  toma mucho de lo que Bottin hizo hace más de 40 años. Pero no fue la única injusticia con esta maravilla. Carpenter cedió la composición de la banda sonora (él suele encargarse también de eso) al maestro Ennio Morricone (6 veces nominado al Óscar aunque solo lo ganó por Los odiosos ocho). Una música inquietante que ayuda a aumentar la terrorífica atmósfera la peli y que, hay que joderse, fue nominada a los Razzies (los anti Óscar) como la peor banda sonora del año.
Recuerdo que vi imágenes por primera vez de LA COSA el año de su estreno en el programa de reportajes de actualidad Informe Semanal. Yo tenía 7 años y quedé totalmente impactado. Ponían los pelos de punta. Cuando por fin pude verla en vídeo (a escondidas de mis padres), el terror se multiplicó por mil, poniéndome los pelos de punta y a prueba mi voluntad de no apartar la mirada ante las escalofriantes escenas que mis ojos veían. Si no la habéis visto, no os la perdáis. Si ya la visteis, revisitadla. Porque Tarantino, lo siento, los 80 no es la peor década la historia del cine y LA COSA, como el resto de pelis en esta serie de posts. es buena muestra de ello…
 

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