Las obras en pequeño formato son una gozada, porque en poco espacio puedes perderte y volverte a encontrar, entre versos, pliegues, y también imagen. Hasta el momento conocía algunos casos como, Nanoediciones, que siempre nos deleitan con sus proyectos originales, intensos y micro. Nos acordamos de este formato reducido que han seguido asimismo la revista de poesía La naval, o Hache. También hay editoriales como Papeles Mínimos, y otras, que han editado en ocasiones en pequeños formatos de este tipo, además de publicar plaquettes. Por otro lado están las microeditoriales de fanzine, que comparten el amor por lo pequeño, concreto, y al fin y al cabo exclusivo, como Bombas para desayunar. Ahora se une al panorama de la microedición: ad minimum, una microeditorial independiente, interesada en la publicación de obras en pequeño formato, se trata de un tipo de plaquette, de un formato diferente al habitual en estos casos, más sencillo, a modo de desplegable e ilustrado. Es un proyecto adecuado al contexto actual, ya que no requiere grandes inversiones para hacer sus ediciones, y es además, un bien accesible a cualquiera. Nos dicen desde ad mínimum, “Nuestro objetivo es promover la poesía y la ilustración contemporánea. Por ello, partimos del lema menos es más para crear libros bonitos, en tirada breve, formato sencillo y posibilidades infinitas”. Ángel Paniagua -poeta consolidado- al hablarnos sobre el autor, en la publicación, no puede dejar de ser creativo y lírico, nos introduce al joven poeta así “Ignoro aún si Manuel Pujante sabe lo que es la poesía, pero se me antoja que la poesía sí sabe quién es Manuel Pujante. Es más, que le tiene cogido por la pata y no le deja soltarse fácilmente. Y que cuando eso ocurre -que alguna vez ocurre- le persigue incansablemente hasta que logra de nuevo darle caza y le obliga a situarse así donde muy pocos se atreven, en el centro mismo del poema, preparar ese extraño cóctel suyo de fragilidad y contundencia mezcladas a partes iguales y servírnoslo en vasos de palabras.” Creo que tras ese comentario poco se puede decir más, sin duda, me ha encantado esta plaquette, creo que es un escritor con carisma, muestra su vulnerabilidad sin miedo, y una percepción del tiempo, por momentos, que comparte como dardos, con el lector, dispuesto a una lectura atenta y afectuosa, ese ritual de leer en soledad, que te hace ser más consciente de la insoslayable subjetividad, se agradece la complicidad con los versos que se leen y con el poeta que parece estar presente en sus palabras. A continuación podemos leer uno de sus poemas “Lluvia” que conforman la propuesta de ad minimum, también traducido al portugués (en el proyecto http://numsogrito.wordpress.com )
LLUVIA
Fuera no llueve ni es la ciudad
una estampa bohemia.
Lo prefiero, la lluvia me molesta
como todas las cosas que te calan
y te enfrían.
A veces ella llueve, pero su lluvia es distinta
y dolorosa, como de coronas
de espinas en sus ojos,
como de frío en los nudillos, como
frío en el frío.
Hoy
su lluvia es un nosotros en la nieve
al que la nieve cubre lentamente
y atenúa.Su lluvia hoy
es lenta, demasiado, cae con ritmo
funerario, quebrada —como luz
por el frío, como astillas
de la luz, como una muerte lenta.
La ilustración de Violeta Palomo, me parece que conjuga muy bien la figura humana con elementos geométricos, en un paisaje que parece fluir al ritmo de los poemas, donde se refleja un tránsito.
Los afluentes del río
Manuel Pujante
Ilustración Violeta Palomo
2014
Manuel Pujante (Murcia, 1990). Codirector de la revista de literatura ‘Seconal’. Ha publicado en las antologías digitales ‘Tenian veinte años y estaban locos’ de Luna Miguel e ‘Inólitos’ de Joaquín Piqueras y en la revista ‘El Coloquio de los Perros’. Actualmente de codirector de la revista de poesía ‘La Galla Ciencia’.
Violeta Palomo (Murcia, 1984). Ilustradora. Sus grandes pasiones son las barbas, los conejos, las flores y desbastar. Parte de su trabajo puede encontrarse en violetapalomo.blogspot.com.es
Por Violeta Nicolás
Me gusta todo tipo de poesía y de cualquier manifestación literaria. La contemporánea también. Es extraordinario este poema. Una gozada. No sabía la existencia de esta revista y de estos escritores. Me gusta.
¡Me alegro de que te haya gustado Juan Miguel! 🙂 Hay mucha poesía por descubrir.