Los miraba fijamente, me concentraba en el abismo, como se mira abajo una cantera, innumerables millas hacia abajo, mis manos vacilaban como ganchos para sacar sueños de una jaula. ¡Oh, hambre mía, hambre mía! Anne Sexton Fue Houellebecq quien señaló que la lucidez solo nos puede ser proporcionada por las sensaciones extremas como el