Olía a Brumel y le encantaba Leonard Cohen. Incluso solía vestir como él: pantalón y americana negros, camisa del mismo color y corbata ocasional de idéntica tonalidad. En ocasiones se tocaba la cabeza con un borsalino cuya tonalidad no desentonaba con el vestuario. De tanto verlo de esa guisa supe que llevar sombrero significaba que
Los susurros del vaho
Se despertó sólo. Palpó el lado derecho de la cama, aún cálido, y lo notó frío y vacío. Fue cuando abrió los ojos y los clavó en el techo de la habitación. Ella había cumplido su promesa.Suspiró y se llevó las manos a la cara, que se restregó primero con suavidad para luego hacerlo con
Esa sensación de soledad al llegar al punto final
Suele ocurrir cuando algo acaba. Un amor, un buen libro, una cerveza… Desasosiego.