LA CAJA de Oscar M. Prieto Todos los martes, con trampa y sin cartón.

Querido Óscar,

Estoy con tu nueva novela “Y por esto el príncipe no reinó” y te diré que el libro me ha enganchado, me ha hecho mucha compañía estos días, y le he dado un buen empujón. Llevo un poco más de la mitad. Siempre leo cuando me acuesto, y desde hace días me gusta pensar cuando me preparo para acostarme que voy a coger tu libro. 

Creo que has madurado como escritor, no es solo un libro muy bien escrito como los anteriores, sino que se percibe ahora más “literatura”, más arte. Es sutil, no son grandes descripciones, reflexiones, sino la sensación interior que deja. En muchas ocasiones he vuelto a releer el párrafo o la frase porque la he disfrutado y quiero volver a saborearla. Sucede con bastante frecuencia, y desde luego más que en los previos. 

Me parece original, y muy difícil de llevar a cabo sin que se note la transición, hablar del rey desde el narrador, y hablar del eunuco del palacio en primera persona. Se podría decir que son dos libros en uno, pero saltamos de uno a otro con total naturalidad y sin que se note el cambio de registro. Son dos historias paralelas, pero no del todo porque sabemos que al final se cruzarán en un punto, y la intriga de saber el momento y cómo le añade una tensión a la historia que hace que quieras proseguir con la lectura.

Parte esencial son los mitos griegos. Ahí poco puedo juzgar, puesto que mi conocimiento apenas alcanza a haber leído la Odisea. Cualquier otro podrá criticar mejor si están bien traídos o no estos mitos, si son los mejores o son insuficientes, pero desde mi ignorancia a mí me parece que los elegidos, y cómo son tratados, están bien traídos a colación para cumplir su función didáctica. 

Porque este es yo creo el propósito del libro, no una muestra de erudición de historia y mitología griega, sino una reflexión sobre el poder. En las reflexiones que realiza el autor sale a la luz el filósofo que eres, el poso que han dejado tus diversos estudios, y de nuevo, éstas también son objeto de relectura. Me gustan mucho, sinceramente, y hasta ahora estoy de acuerdo con todas ellas. La lógica con que se desarrollan y los matices que recogen de la realidad de este mundo demuestran un profundo conocimiento de la naturaleza humana. 

Termino con un consejo, y vaya por delante mi perdón por la osadía. Simplemente como un lector al que pocas cosas le agradarían tanto como un nuevo libro de uno de sus autores favoritos. En el próximo tienes que dejar volar más la pluma, que salga totalmente el arte que aquí ya ha asomado con claridad y está pidiendo pista. Que se revele y que se rebele, que salga de esa habitación de la que hasta ahora no se ha atrevido a salir del todo, quizá por timidez o inseguridad. 

Es el salto que te queda, el más difícil, y también con sinceridad, sé que no todos lo consiguen. Es el paso de escribir un libro bueno a un gran libro. Creo que tienes posibilidades, y tendrás que ser valiente, sin importarte los riesgos. 

Te contaré cuando llegue al final.

Un abrazo.

Rafa.