Déjate liar.
Déjate querer. Déjate besar.
Tómate un mojito, un cubata, mil cervezas.
Come jamón crudo, tostas de setas, tacos de carnitas con salsa verde picante, muy picante. Tan picante que tendrás que probarla para sentir el sabor de lo prohibido. Descubre sitios nuevos, sitios que antes eran otros, otros que siguen siendo los mismos, pero que la música, la gente, la luz, tú, hacen que siempre sean distintos.
Conoce a gente nueva, sin dudarlo, y conserva a los que tienes, porque si no lo haces dejarás de tenerlos. Vacila a los amigos, a los taxistas, a los puertas, a las camareras que piensan que no mereces ni acercarte a su inmaculada presencia. Ríete de ellas, y de todos los que se creen otra cosa que no son. Ama a las que son auténticas. Más complejas o más simples, más tranquilas o más alegres, más llenas de vida o más melancólicas, más bellas o más bellas, más locas o más absolutamente locas.
Dejate liar.
Dejate querer, tocar, besar, emborrachar.
Vive el momento.
Ríe sin parar, porque las risas no echadas son como los polvos perdidos. Nubes que se escapan en el horizonte; olas que se rompen y desaparecen; puestas de sol que nunca se repetirán. Habla de lo que sea. Conversaciones absurdas o trascendentales que sólo ahí, en ese momento, con esa gente tan absolutamente loca, tienen sentido. Como fuegos artificiales amarillos, que diría Keruac. Baila hasta que salga el sol, canta rancheras, súbete a las barras, mójate con la lluvia fría de la noche. Sueña con ser una estrella de rock, con el sol de Tarifa, con las mulatas de Cuba, con las calles empedradas de Santiago…
Bebe caipiroskas de vodka negro aunque creas que no son dulces. Come tartas de zanahoria que parecen salidas de un cuento de Alicia. Observa a la gente, aprende de ellos, intenta no parecerte a nadie, aunque sean unos capullos, aunque sean seres increíbles, únicos, excepcionales. Llámala para decirle que la quieres, aunque sea 14 de febrero. O no: olvídate de tu historia. Olvídate de ellos, de ellas. De las alegrías o las penas que provocaron. Ellos ya no están allí. Ellas tampoco. Ni volverán a estarlo nunca más. Nosotros sí estamos.
Déjate liar. Déjate querer, tocar, besar, acariciar, emborrachar.
Tómate un mojito, tres cubatas, mil tequilas, cien mil cervezas.
Ríe sin parar.
Que todo fluya.
Os quiero, os deseo.
Hermoso… Es verdad, la vida hay que vivirla, disfrutarla, no sedebe desperdiciar.
Gracias, Magda. Un saludo!
Me recuerda a un relato que escribí hace tiempo, el cual lo puedes encontrar en mi blog personal y literario (runnersinaliento.blogspot.com.es) perdón por el spam, pero debí comentarlo. Prometo no volver hacerlo más. Por otro lado, creo que hay que aprovechar más el tiempo en hacer cosas productivas y menos en quejas, e incluso en mentiras. Al fin y al cabo, el perdedor busca excusas mientras que el vencedor motivos 🙂
Me alegro de que coincidamos entonces. Un saludo, Isa. Es chulo tu blog 😉
Me ha gustado mucho la entrada, y ha sido una grata sorpresa encontrar este blog. Llego aquí por curiosidad/causalidad. Soy la chica de la caseta del al lado en el SantJordi. Ahora me surgen dos necesidades: ir al Prado a ver los cuadros de Goya, y leerme el primer libro. Quiero ver el mundo a través de tus ojos.
Un saludo.
Gracias teresa! Ah, creo que ya sé quién eres 😉 espero que os fuera muy bien con las ventas y que no os diera mucho el sol, que vosotras lo teníais aún peor (yo llegué a Madrid como si hubiera estado en la playa). Pues hablamos cuando quieras y te envío el libro dedicado (añademe al facebook si quieres), que además esta semana tengo algunos envíos que me quedaron pendientes a Barcelona. Un saludo!
1.Nosotras también veníamos de Madrid.
2.Deberíamos haber previsto un toldito como el vuestro. (apuntado para la próxima!)
3.No tengo Fbk, pero hablamos por email.
4.Estaremos también en la Feria del libro, en el Retiro. Me lo puedes firmar en persona.
🙂
Pues sí, un toldito es fundamental 😉 Ok, contactamos por mail. En la feria de Madrid yo también estaré en la caseta de mi editorial Bohodón, ya veremos qué días, así que os haré una visita.