No lo digo yo. Tampoco un niñato, ni muchísimo menos un personaje de ficción que vivió hace tiempo en una galaxia muy, muy lejana. Lo dice un abogado de 90 años. Que añade: “son un cáncer que hay que extirpar”. Ángel Pelluz. Defensor de dos presuntos neonazis que dejaron en coma a un vagabundo hace