En 1980 se estrena en España la película más loca, insólita, megalomaníaca y supuestamente gamberra de Steven Spielberg. Una comedia ambientada en la Segunda Guerra Mundial con un presupuesto de 35 millones de dólares (una pasada en esas fechas), 6 meses de rodaje (en lugar de las 14 semanas previstas) y un reparto estelar: Dan










