Libro solo para adultos.
Advertencia: capítulos sexualmente explícitos.
No recomendado para menores de 18.
Advertencia: uso extremo de la violencia.
O de 13.
Advertencia: lenguaje soez y ofensivo.
Y todo con sus respectivos iconos junto al correspondiente mensaje, en un lugar visible de la portada o contraportada. ¿Os lo imagináis?
Hace unos meses estaba firmando en la Feria del Libro de Madrid. Y apareció una mujer con su hija, que debía tener 12 ó 13 años.
– Ha visto el libro…- dijo la madre-. Y ha sido amor a primera vista.
Almas Grises, una novela sobre una sociedad secreta que se alimenta del dolor de los demás.
– El libro es un tanto sórdido… y violento- comenté, intentando no sucumbir al entusiasmo porque por fin alguien se hubiera acercado a la caseta y mostrase interés por mi novela.
– No pasa nada- respondió la madre-. Está acostumbrada a leer de todo.
Mientras la niña miraba el libro con los ojos abiertos como platos.
La madre compró el libro, yo se lo dediqué a su hija, ésta lo cogió como si fuera, al menos durante esa mañana de sábado, el tesoro más valioso del mundo, y la persona que atendía la caseta me dedicó un guiño que significaba, “ole, un libro vendido”.
Pero… ¿era Almas Grises un libro adecuado para una niña de su edad?
No lo creo.
Y, aunque fuera tímidamente, el autor estuvo allí para decirle a la madre que quizá no era una lectura apropiada para su hija. ¿Os imagináis a un dependiente de cualquier gran superficie haciéndolo también… aun a riesgo de perder una venta?
Las películas están clasificadas por edades. Y si todos estamos más o menos de acuerdo en que, por ejemplo, La matanza de Texas, no es recomendable para menores de 18 (17, 16, 15… es difícil establecer el límite, como para conducir o poder tomarse una cerveza), ¿tendría sentido que ocurriera lo mismo con, por poner otro ejemplo, Escupiré sobre vuestra tumba?
Los videojuegos también se clasifican por edades. Y todos estamos de acuerdo en que, efectivamente, Manhunt no es un juego muy infantil. ¿Y American Psycho…? ¿Es un libro para la chavalería?
Si hay discos que advierten del contenido de las letras de sus canciones en la cubierta…, ¿estaría mal hacerlo también en algunas novelas como, por ejemplo, Escoria o La máquina de follar?
Algo parecido se propuso en Inglaterra hace tiempo, y autores como J.K. Rowling o Terry Pratchet (hasta un total de 750) firmaron en contra de la iniciativa. ¿Qué es más importante? ¿Vender libros? ¿O que un padre sepa qué va a leer su hijo cuando compra un libro que él le ha pedido y del que no tiene tiempo, ni ganas, de informarse?
Mi sobrina tiene 13 años. Y no creo, por mucho que las haya escrito su “tito”, que Almas Grises o Isla Perpetua sean libros adecuados para ella.
Por ahora.
Y si en la portada o contraportada de alguno de ellos figurase una advertencia sobre su contenido, no me sentiría amenazado. Al contrario. Puede que ese mensaje llamase la atención de lectores que disfrutarían más de ellas porque es el tipo de novela que están buscando, algo que no se adivina leyendo la breve sinopsis que la acompaña.
Aunque, si no se ha hecho aún de forma generalizada lo mismo es que la idea no pasa de soberana gilipollez…
O quizá lo que ocurre es que quienes tienen que ocuparse de este tipo de cosas piensan que lo que es una soberana gilipollez son los libros.
O da igual lo que sea lea… porque la lectura siempre es cultura.
O quienes tienen el hábito de leer están más informados sobre aquello que les gusta, los libros, y lo saben todo del que van a leer o regalar… no como quien va al cine o compra un CD, que lo hace más al tuntún…
O…
Puea yo con 12 años recien cumplidos leí “Escupiré sobre Vuestra Tumba” y no me quede precisamente trumatizado, para mi fue un comienzo a leer mucho y de todo