Como habrá quedado bastante claro a lo largo del poco tiempo que llevo en el blog de Culturamas, tengo obsesión por cómo denominamos a las personas y a las cosas. En otra ocasión, para explicar de dónde venían los nombres de algunas localidades, os hablé de esa etapa en la vida en la que los padres se pasan horas, días e incluso meses, pensando en el nombre que le pondrán a su futuro vástago. Pues bien, no siempre es así, a veces los padres no pensamos, sí, habéis leído bien, algunos padres son tan originales que…bueno, tienen que intervenir las autoridades para advertir que no todos los nombres son válidos y que podrían resultar perjudiciales para el normal desarrollo en la sociedad de la criatura. Esto pasa sobre todo cuando tienes un apellido especialmente combinable.
Lo explicaré con un ejemplo, hace años trabajé durante el verano en unos grandes almacenes conocidísimos en España, uno de los jefes de la planta en la que estaba tenía por apellido “De los bueys” y a una de mis compañeras le tocó ir a pedirle una especie de perchero con ruedas que se utilizaba para transportar las prendas de un almacén a otro o a diferentes partes de la tienda. Total, que cuando la chica se puso delante del jefe, que le imponía muchísimo respeto, con voz temblorosa le dijo: “Señor de los bueys, ¿me presta el carro?”. El jefe, que pensó que uno de sus compañeros le estaba gastando una broma, la miró fijamente y le dijo: “Enrique, me llamo Enrique”. Mi compañera pasó un mal trago y el jefe también, los demás nos desternillábamos de risa, eso sí.
Para evitar ciertas situaciones como la descrita, el reglamento que regula el registro civil nos advierte una serie de normas que parecen obvias pero no deben serlo tanto, entre las que informan que no se puede poner el nombre de la fecha, lugar y hora de nacimiento al recién nacido, o nombres que en combinación con el apellido, resulten contrarios al decoro.
Este cuadro que os dejo a continuación resume muy bien todo lo que os he contado, espero que lo disfrutéis más que las pobres criaturas que han estado a punto de quedar marcados de por vida por la originalidad de sus progenitores.
Mi
Mi amigo Perfecto Sarasa, le dijo a mi amiga María Dolores del Pulgar, que si quería ir de fiesta a casa del capitán Tan, ésta, zozobró de alegría y llamó a su amigo Armando Chozas para que la llevara hasta el punto donde habían quedado Perfecto y María Dolores, pero este no fue más que el inicio de su bonita historia de amor. Acabó en boda, lógicamente y, hete aquí, que, cuando tuvieron su primer hijo tuvieron su primera y más gorda discusión; ella quería ponerle Arturo y él, Perfecto, a lo que ella espetó: ¿No se han reído lo suficiente de ti que aún tienes que hacer que el niño sea el hazmerreír de su colegi0?
Fue el principio del fin y, ahora hace seis meses, se han separado. Ella marchó con el doctor Javier Cortés del Tajo y él con la señorita Delicado.
En fin, las combinaciones pueden ser tantas y tan variopintas que pueden dar lugar a situaciones más o menos jocosas y más o menos absurdas, pero algunos de los nombres antes expuestos en mi relatillo absurdo de después de hacer la comida, son absolutamente ciertos.
Saludos y otra vez, fenomenal Gala.
Emilio Vigoamigo.
El hecho de que me haya partido de risa leyendo esta lista de nombres evidencia la tremenda jugarreta que esos padres inconscientes hacen a sus hijos para el resto de sus vidas. Y me parece oportuno y necesario que las autoridades intervengan para proteger la dignidad de esos pequeños ciudadanos. Buen post, como siempre. Felicidades.
Jajaja! ¡Cómo me he reído!
Pero por otro lado, ¡pobres niños! ¡En qué piensan los padres, si es que piensan? Os imagináis el estigma ya de nacimiento con semejantes nombres? ¿Qué culpa tiene una niña para que le pongan ‘Debora Melo’? O a un varón ‘Aquiles Bailo’?
Demencial la locura de algunos padres… Si un bebé, se lo toman a broma… No quiero ni pensar cómo van a educar a estos niños.
En fin. Genial, Gala. Como siempre.
Jajajaja, ya conocía algo de esta lista… pero desde luego la anécdota que comentas es cuanto menos divertida. Vaya mal trago para la pobre…
De todas formas, considero que hay ciertos nombres que no se deberían poner dado el apellido que llevan detrás. Como bien dices… debe dificultar, en ciertos aspectos, el desarrollo del niño socialmente.
jajaja….muy bueno, Gala…!!
Saludos míos y de Elba Lazo y Elsa Lame !
Alberto
¡¡¡ Elvis Tek !!!
Me lo quedo, mío, mío, mío. Me parto y me mondo.
Un besito linda.
Te sigo por aquí desde mi madriguera, y desde allá con mis alas. 😉
Nombres imposibles: Iloveny y Usnavy…
Si mirás esta página , ¡encontrarás un motivo más para reir!Cuando el nombre dice todo
http://www.pagina12.com.ar/diario/sociedad/3-71338-2006-08-13.html